El impacto, confianza y responsabilidad del uso de IA

ChatGPT es una prueba más del potencial de la Inteligencia Artificial, IA, la misma que se ha desarrollado para distintos campos. IBM, por ejemplo, cuenta con 40.000 casos o proyectos con enfoque empresarial, en 20 industrias diferentes. Su trabajo con IA viene desde la década de 1950.

Recientemente, a nivel mundial, junto a la NASA anunciaron una colaboración para utilizar inteligencia artificial de IBM aplicada a los datos de los satélites de observación de la Tierra con el objetivo es identificar cambios en la huella geográfica de fenómenos como desastres naturales, rendimiento cíclico de cultivos y hábitats de vida silvestre, para ayudar a los investigadores a proporcionar análisis críticos de los sistemas ambientales de nuestro planeta.

Andrés Maldonado, gerente de IBM en Ecuador, señala que esta tecnología es una realidad en las empresas de todos los tamaños en sectores como banca y servicios financieros, retail, alimentos, telecomunicaciones, entre otras. Explica que, mediante usos variados, la IA está resolviendo problemas específicos con impacto profundo y una rápida generación de valor, especialmente en áreas como servicio al cliente, gestión de riesgos, planificación y previsión. Trayendo grandes ventajas ayudando a las organizaciones a acceder, administrar y obtener información de manera centralizada de grandes cantidades de datos, independientemente de dónde residan, cómo se almacenen y sin tener que moverlos.

Desde la perspectiva de IBM, dice, lo más importante es que la IA siempre esté centrada en las personas, potenciando sus trabajos, y sea una tecnología al servicio de los seres humanos, por eso hablamos de ‘Inteligencia Aumentada’.

IBM se centra soluciones de IA para las empresas, brindando a las organizaciones las capacidades clave como procesamiento de lenguaje natural, confianza, automatización, capacidad de ejecutarse en cualquier lugar o en cualquier entorno híbrido de múltiples nubes. En esa medida, disponen de herramientas que van desde asistentes virtuales o chatbots, hasta soluciones que ayudan a predecir o detectar ciberataques en tiempo real, o incluso automatización de procesos, también la aplicación de IA a áreas emergentes como sostenibilidad, la automatización de redes para ayudar a habilitar 5G y AIOps (Operaciones de IT impulsadas por IA).

Para Maldonado las aplicaciones que las empresas deben incorporar en sus procesos hacia la transformación digital dependen de la necesidad y del problema que quiera solucionar con IA. Sin embargo, menciona un estudio de IBM que señala dos principales áreas y usos en empresas que ya cuentan con esta tecnología, y son la detección de seguridad y/o amenazas y uso de la IA conversacional y quienes apenas están en la fase de exploración de la IA la utilizan principalmente en marketing y ventas.

Pero independientemente de ese potencial que permite la Inteligencia Artificial, es importante tomar en cuenta que la IA es una tecnología que requiere de entrenamiento y se basa en grandes cantidades de información, por eso es fundamental que no haya sesgos, sino un manejo ético y transparente.

Indica que la Inteligencia Artificial no puede ser una caja negra. Para todo el que la use, debe ser explicable el origen de la recomendación o el resultado. Esos parámetros éticos deben ser críticos para los requisitos regulatorios, al tiempo que mantienen la propiedad y la protección total de los datos y la información.

“IBM se ha centrado en promover el diálogo global sobre la confianza y la ética de la IA durante años. Lo hemos estado impulsando constantemente en todas nuestras operaciones, desde nuestra investigación y tecnología hasta nuestro trabajo en políticas públicas y asociaciones con partes interesadas globales y líderes de opinión”.

Finalmente, Maldonado comenta que el uso correcto de la IA es responsabilidad de la empresa que ofrece la tecnología y de quien la usa. Para IBM, por ejemplo, es clave entregar una IA transparente y explicable, que quien usa la herramienta pueda saber cómo se llegó a esa conclusión y reducir sesgos. “Hoy, las organizaciones y los gobiernos necesitan implementar sistemas seguros, transparentes, explicables y confiables. De lo contrario, no solo se enfrentan a la caída de la competencia o a experimentar enormes pérdidas comerciales por errores en la configuración o bases de datos pobres y sesgadas, sino también, a fuertes multas regulatorias, golpes a la reputación corporativa o incluso acusaciones de sesgo”.

Impacto de herramientas de IA en Latinoamérica en 2022

Según estudio de IBM

• 29% de las empresas en Latinoamérica ya están utilizando la IA en sus operaciones comerciales. En comparación con 2021, esa cifra creció un 8%.
• El 43% de las empresas informan están explorando el uso de la IA
• El 66% de los profesionales de TI en la región, en compañías que están explorando o implementando IA, ha acelerado sus inversiones y su despliegue de IA en los últimos 24 meses.