Pequeños pasos, grandes cambios, también es posible en el ámbito corporativo
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Por Iván Esparza, Director proyectos de transformación y cambio, Grupo Empresarial Automotores y Anexos.
La técnica ya la sabes, ahora vamos a hablar de lo demás. En la vida los resultados vienen de hacer constantemente pequeños ajustes diarios que con el tiempo nos permiten estar en un lugar completamente diferente del que iniciamos. La naturaleza que es tan sabia aplicó un método igual, las especies han tenido una paulatina y constante evolución y también desaparición; eso quiere decir que la única manera de lograr algo es trabajarlo todos los días. Si entendemos esta gran lección, podemos aplicarla a nuestro ámbito laboral, y en el contexto de la llamada transformación digital.
En lo personal, quienes me conocen saben que no me gusta el enfoque netamente comercial y de determinadas herramientas para decir que existe o no una verdadera transformación, y más aún no debe ser un concepto usado por las grandes empresas de tecnología que nos quieren sumar en una carrera de compras de herramientas para ponernos una etiqueta.
Ahora bien, hay que mantener las distancias debidas, muchos dirán no se puede tomar en el ámbito corporativo tanto tiempo y es verdad. Me permito en base a la experiencia personal y profesional acumulada por los años describir cómo lo aplico, todo es cuestión de tiempo y el tiempo no es el mismos para todos.
- Acabar con el caos: Vivir en una situación de caos constante no permite ver lo increíble de la creatividad, y en la tecnología la creatividad debe abundar en cada uno de nosotros para entender qué nos quita el tiempo, ¿cómo se logra?,
- Apartarse y escuchar: si no conversas constantemente con tus principales clientes, no podrás identificar en qué fallamos, da espacios para entender la realidad de todos no solo de los gerentes, no seas tan vertical y jerárquico.
- Aceptar que no somos perfectos: quitar el “ego” que vivimos los equipos de Tecnología, Innovación, Procesos, o los que existan en tu organización, se debe reconocer que las soluciones son trabajo de todos y que las sugerencias pueden venir de cualquier parte, no por ser gerente tienes respuesta a todo.
- Ponerte en el lugar del otro: tanto del equipo nuestro que vive el día a día como del cliente que recibe lo que damos, en tal sentido no se puede mejorar sin empatía, los servicios son dados por personas, sino conocemos las preocupaciones de las personas seremos más un estorbo y no una mano de apoyo.
- Priorizar: tener claro lo importante, y este norte no lo damos nosotros, no existe prioridad sin estrategia
- Solucionar: plantear al menos 3 formas de solucionar lo expuesto, no solo pensar que la tecnología es la salida.
- Crear equipos con la misma visión: sino reproduces esta visión, no podrás salir del caos, no todo debe estar en tus manos, debes hacer que todos los miembros del equipo piensen igual
- Volver al punto 1,
Reconocer los momentos.
No somos iguales ni las personas y peor los cuerpos más complejos como las organizaciones que tienen una consciencia colectiva y cultura propias, en tal sentido los cambios relevantes deben partir de conocer hacia dónde va la organización en un plazo de tiempo. Y eso es conocer su estrategia, pero no de lejos, conocerla ampliamente, haber participado de su construcción, de aquí vendrá toda la matriz de proyectos y su aporte. En este momento es donde se activarán todos nuestros recursos creativos porque un proyecto no se crea sin la asociación de varias personas, áreas y sin una esencia, los proyectos deben ser tan tangibles que se los pueda describir como si fuesen una persona.
- Entender si las organizaciones están listas para emprender el viaje de cambio: muchas veces pasa que los cambios no se reconocen y solamente se vuelven conscientes una vez que las organizaciones se enfrentan a situaciones de estrés, como lo marcó la pandemia para todos, y esto dependerá de la madurez organizacional de cada una, en esto no se puede influir mucho, a no ser que se tenga una estrecha relación con los tomadores de decisiones.
- Convertirte en un generador de cambio. Si tienes la capacidad de mirar a largo plazo pues lograrás proyectar con más claridad y ejemplificación, así lograrás sumar más y más, y el cambio comenzará a darse,
- Crear proyectos, armar equipos, gestionarlos, es mejor crear células de proyectos, pequeños organismos que hacen que el todo funcione y con esto toda la organización que es gigante se moverá sola.
- Hablar en positivo: se crea desde la imaginación y se materializa con la acción, el poder de lo que dices hace que los proyectos lo vivan,
- Volver al punto 1.
Entorno cambiante: La planificación y la estrategia se alimentan de deseos (visión y misión) y sobre todo de supuestos los cuales son impactados por eventos externos e internos, eso quiere decir que el entorno en el cual se desenvuelven las organizaciones es muy variable, en tal sentido lo que construimos debe ser tan flexible como se pueda. Sé que es complejo, pero sí es posible. Tener un plazo de trabajo con visión anual y/o bianual es un gran logro, llegar a superar este tiempo es una proeza. En la práctica lo mejor es tener claro dónde queremos estar, pero los tiempos no dependen de nosotros, si aportamos, pero todo puede cambiar en un segundo, cuando la ola de cambios inicia debes estar listo y mirando hacia el frente para agarrar la velocidad correcta.
Por qué no hablo de tecnología pura en este espacio, porque las herramientas pueden ser cualquiera, porque no todas las herramientas son para todos y porque las herramientas no son el fin de la transformación y esto es genial. Lo que sí es relevante es reconocer en el centro a las personas clientes internos y externos porque a todos nos gusta ser tratados como sujetos con emociones y conexiones y no como transacciones.
Para finalizar, estas líneas que me he permitido compartir, las llamo pequeños pasos para grandes cambios, porque requiere de la suma de un grupo de personas que sientan el deseo de salir de lo cotidiano y moverse a lo desconocido, lo llamo pequeños pasos porque sin las personas las estrategias no funcionan.
En el futuro cercano todos los servicios que hoy son modernos serán un comodity, no es una moda el tener una cultura de cambio, debe ser una competencia impresa en todos, en lo personal y profesional debemos ser la misma persona. También se llama pequeños pasos porque lo que es bueno para uno no lo es para otro, no existen recetas, no existen proyectos de transformación iguales, porque como dije, todo es diferente siempre, en una misma línea de tiempo nosotros mismos no tomamos las mismas decisiones.
Cuando se logra dar el primer paso para lograr el cambio, el reto será siempre sostenerlo y no parar nunca más.