Nuevos vientos para la estrategia empresarial.
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Por: Milton Benavides, Director de IT/ Gestión de Proyectos, CEO Intellia Solutions.
La hiperautomatización es una tendencia tecnológica clave que combina inteligencia artificial (IA), aprendizaje automático, RPA (automatización robótica de procesos), procesamiento de lenguaje natural y otras tecnologías avanzadas para transformar la operación empresarial. Su impacto es profundo en la estrategia empresarial, permitiendo eficiencia operativa, reducción de costos y mayor capacidad de innovación.
No se limita a reemplazar tareas manuales aisladas, sino que crea un ecosistema interconectado donde múltiples herramientas trabajan en conjunto para optimizar operaciones con mínima intervención humana. Gartner ha llegado a afirmar que la hiperautomatización “ha dejado de ser una opción para convertirse en una condición de supervivencia” en las organizaciones.
En Ecuador, la adopción de tecnologías de automatización ha venido creciendo de forma progresiva en la última década. Los primeros pasos se dieron en torno al año 2000 con la introducción de RPA en empresas de telecomunicaciones, seguido por el sector bancario, y en años recientes se ha masificado su uso en distintas industrias.
A nivel global, la hiperautomatización se ha posicionado como una mega-tendencia tecnológica que está redefiniendo la forma de operar de las organizaciones. Grandes firmas de análisis predicen una rápida expansión: según Gartner, para 2026 casi un tercio de las empresas habrá implementado la hiperautomatización en más de la mitad de sus procesos de negocio, un salto notable si se considera que a mediados de 2023 menos del 10% lo había logrado.
La automatización y la hiperautomatización están transformando los modelos de negocio al hacerlos más eficientes, escalables y basados en datos, cambiando los modelos de negocio tradicionales al permitir la automatización de tareas complejas y repetitivas. Empresas que anteriormente dependían de procesos manuales y estructuras rígidas están adoptando modelos más ágiles y orientados a los datos. De manera que las empresas están logrando una mayor capacidad para personalizar productos y servicios, acelerar la toma de decisiones y adoptar nuevos enfoques de monetización, como los modelos de suscripción o pago por uso.
Al automatizar procesos complejos y minimizar los errores humanos, las empresas reducen costos y tiempos de ejecución para operar y actuar con agilidad y precisión. Con esa capacidad de personalización a gran escala las empresas pueden comprender mejor el comportamiento de sus clientes y ofrecer experiencias personalizadas.
Con la inteligencia artificial y análisis predictivo, las empresas pueden anticipar tendencias, optimizar recursos y reducir la incertidumbre en sus estrategias.
Actualmente, vivimos una fase de transición entre la automatización tradicional y la hiperautomatización. Muchas empresas han adoptado RPA y automatización de procesos, pero aún están en proceso de integrar IA y aprendizaje automático para lograr mayor autonomía y adaptabilidad
En diversos sectores, especialmente en aquellos que requieren alta eficiencia operativa, la automatización e hiperautomatización viene a mejorar la experiencia del usuario y procesos. En la banca y los seguros, la automatización ha transformado la gestión de reclamaciones, el análisis de riesgos y el servicio al cliente. También ha fortalecido el cumplimiento normativo y la detección de fraudes.
En retail y e-commerce, la automatización optimiza la logística y la gestión de inventarios, lo que permite anticipar la demanda y reducir costos. Además, la personalización de ofertas de marketing a gran escala impulsa las ventas y mejora la relación con los clientes.
La manufactura ha incorporado robots inteligentes en ensamblaje y mantenimiento predictivo, lo que incrementa la productividad y reduce tiempos de inactividad y costos de reparación.
En el sector salud, la automatización agiliza diagnósticos, gestiona historiales médicos y mejora la atención a los pacientes, reduciendo tiempos de espera y aumentando la precisión en los tratamientos.
Los organismos de gobierno tienen la posibilidad de automatizar para simplificar trámites, mejorar la transparencia y reducir costos operativos, haciendo que los servicios sean más rápidos y accesibles.
En telecomunicaciones, la automatización optimiza el soporte al cliente y el mantenimiento de redes, garantizando un servicio más estable y una respuesta más eficiente ante fallos.
La hiperautomatización representa para las empresas ecuatorianas una oportunidad histórica de salto competitivo. Si bien conlleva desafíos en talento, integración y cambio cultural, los beneficios en eficiencia, costo y agilidad la convierten en una inversión obligada para quienes deseen prosperar en un entorno cada vez más digital. Ecuador se encuentra en el camino hacia esta transformación: con casos locales que evidencian resultados positivos y con tendencias globales que empujan en la misma dirección, las condiciones están dadas para que más organizaciones den el paso.