Tecnología y conocimiento en elaboración de modelos presupuestales

Efectivamente, la estrategia es el camino por seguir. María Elena Estrella, Gerente Regional de DW Consulware, comenta que el proceso presupuestal debe cumplir con la visión estratégica, marcando los objetivos que ella pide. Con esa definición, se obtiene medidas tangibles y un presupuesto alcanzable.

“El presupuesto tiene que darme la opción de escenarios que finalmente valide la mejor ruta para llegar a los objetivos, además, buscar la flexibilidad y viabilidad para cambiar el plan las veces que sean necesarias”.

Para la ejecutiva, además, es necesario un continuo seguimiento para tener procesos para un control adecuado del presupuesto, pero sobre todo para dar el giro necesario en función de la estrategia.

Coincide en que para reducir la complejidad al elaborar un presupuesto es indispensable analizar su viabilidad, utilizando escenarios con distintas variables y obtener resultados lo más cercanos a la realidad. “El uso de modelos bien definidos ayuda a definir procesos, con el método de ¿What if? se establecen situaciones de riesgo en posibles escenarios y sus potenciales consecuencias”.

Otro punto para tomar en cuenta son los procesos, la información disponible, y la consolidación automática para llegar niveles de análisis de presupuestos reales eficientes y buenos. Para ello, dice: “La tecnología apoya, definitivamente el modelo y expertise de las áreas que gestionan el presupuesto, ayuda a decidir el modelo presupuestal e identificar los errores”.  “Además, la experiencia muestra rápidamente una problemática y la mejora en el modelo”.

Sostiene que la tecnología es un habilitador y transversal en la gestión de negocio de las compañías, sin embargo, contar con muchas herramientas y sin el conocimiento necesario de quienes conocen a la organización, dará como resultado un modelo presupuestal incompleto que posiblemente no funcione. “De modo que la unión de ambas se vuelve importante en la eficiencia de los procesos”, indica.

Es indispensable el seguimiento continuo a los presupuestos para alcanzar los resultados deseados, pero sobre todo para realizar los cambios necesarios en el momento adecuado.