En el sector logístico la inteligencia artificial (IA) y el análisis de datos son aliados estratégicos para anticiparse, adaptarse y responder con precisión a las exigencias del mercado. Según la encuesta global de tecnología de atención al cliente de Capterra 2024, el 68% de las empresas que integraron IA en sus plataformas de servicio reportan un aumento en los niveles de satisfacción del cliente.
Más allá del transporte físico, hoy la logística se mide por su capacidad para movilizar datos con agilidad. Algoritmos de machine learning procesan historiales de entrega, condiciones de tráfico, variables climáticas e incluso datos sociales, lo que permite anticipar retrasos, ajustar rutas y tomar decisiones operativas más acertadas. Este cambio hacia un modelo predictivo ha reemplazado la tradicional lógica reactiva y está reduciendo costos, optimizando procesos y mejorando la experiencia del usuario.
Uno de los ejemplos más visibles de esta transformación se encuentra en la gestión de la última milla. Sistemas inteligentes permiten ajustar entregas en función de la disponibilidad del cliente, proponer rutas alternativas en tiempo real y alertar sobre posibles incidentes antes de que afecten la operación. Según DHL, la inversión en IT ha permitido reducir en un 40% los tiempos de respuesta y aumentar la eficiencia operativa en un 25%, gracias a la automatización de procesos clave e integración de sistemas.
La experiencia del cliente también se ve fortalecida por la conexión entre IA y canales de atención. Hoy, asistentes virtuales resuelven hasta el 80% de las consultas, ofrecen trazabilidad completa y permiten escalar a agentes humanos sin que el usuario repita información. “Lo que empieza en una app puede terminar por llamada o WhatsApp sin perder contexto; esa fluidez es producto del análisis de datos y la automatización”, afirma Óscar Castro, Business IT Manager de DHL Ecuador.
La logística del futuro se mide en capacidad de anticipación, en fluidez de la experiencia y en la precisión con la que se pueden tomar decisiones basadas en datos