Desarrollar y retener el talento femenino en tecnología: un imperativo global.

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Datos recientes de la UNESCO revelan que solo el 32% de los investigadores científicos en América Latina son mujeres, y esta tendencia se refleja también en el ámbito empresarial, donde apenas el 18% de los cargos directivos en empresas STEM en la región son ocupados por mujeres. Estas cifras destacan la necesidad urgente de fomentar la participación equitativa de las mujeres en el sector tecnológico.

“La inclusión de las mujeres en el sector tecnológico es fundamental no solo por una cuestión de equidad, sino también por su impacto directo en la innovación y el progreso”, señala Martha Ardila, directora en Centroamérica y el Caribe de Red Hat. “La diversidad de género en equipos tecnológicos aporta una amplia gama de perspectivas y enfoques, lo que no solo mejora la creatividad, sino que también fortalece la capacidad de resolver problemas de manera efectiva”.

A pesar de los desafíos, se han observado mejoras significativas en la participación de las mujeres en carreras STEM en Ecuador en los últimos años. Según un estudio realizado por la ESPOL en colaboración con la UNESCO y la OEI, titulado «Situación actual de las mujeres en las carreras STEM en Ecuador» (2023), el porcentaje de mujeres matriculadas en estas áreas ha experimentado un incremento del 10% desde 2020, alcanzando un 40% del total de estudiantes. Aunque este aumento es alentador, la participación femenina en STEM en Ecuador sigue estando por debajo del promedio mundial, que se sitúa en el 45%. Sin embargo, este crecimiento sostenido en los últimos años indica un avance positivo hacia la equidad de género en el ámbito científico y tecnológico del país.

El desarrollo y la retención del talento femenino en tecnología no solo benefician a las mujeres individualmente, sino que también fortalecen a las empresas y a la sociedad en su conjunto. Al proporcionar oportunidades equitativas y un entorno de trabajo inclusivo, las empresas pueden aprovechar al máximo el potencial de todo su talento, lo que conduce a una mayor innovación y competitividad en el mercado global.

“Por ejemplo, en Red Hat, estamos comprometidos con la promoción de la igualdad de género y la diversidad en el sector tecnológico. A través de programas como Women’s Leadership y Red Hat Academy, la compañía se esfuerza por fomentar el crecimiento profesional de las mujeres en tecnología y por crear un entorno donde todas las personas puedan prosperar, independientemente de su género”, señala Bejarano.

En Latinoamérica, Red Hat ya ha logrado alcanzar más del 20% de asociadas mujeres en su staff, siendo la región de NOLA una de las destacadas en este sentido, con varios cargos gerenciales. Red Hat fortalece programas como Women’s Leadership, una red mundial que incluye a mujeres de todas las áreas de la empresa. Además, las ofertas laborales en Red Hat no incluyen ningún requisito vinculado al género, y la construcción de conocimiento es completamente abierta.

La participación femenina en la tecnología es esencial para construir un futuro inclusivo y próspero. La igualdad de género en el sector tecnológico, es crucial aprovechar el talento diverso y crear entornos que fomenten el crecimiento y la participación equitativa. Datos recientes muestran que países como Chile, Costa Rica y Argentina lideran la región en la participación de mujeres en carreras STEM, lo que demuestra que el progreso es posible y alentador.

“Es fundamental reconocer que la inclusión de mujeres en el sector tecnológico no solo es una cuestión de equidad, sino también una necesidad para impulsar la innovación y el progreso en la sociedad. La diversidad de género en equipos tecnológicos no solo aporta una variedad de perspectivas y enfoques, sino que también mejora la creatividad y la efectividad en la resolución de problemas” concluyó la directora en Centroamérica y el Caribe de Red Hat.