Las innovaciones tecnológicas para la interacción entre el automóvil y los conductores se presentan en un vehículo de exhibición especialmente construido: el «Intelligent Vehicle Experience Car».
Estas soluciones podrían entrar en producción en los próximos 3 a 5 años. El vehículo podrá reconocer a los usuarios por sus características faciales y de movimiento, permitiendo acciones como abrir y arrancar el vehículo o activar el portón trasero automáticamente.
El coche de demostración de Continental es una mirada al vehículo definido por software y al mismo tiempo marca el comienzo de la era de la biometría para las futuras generaciones de vehículos. «La biometría abre horizontes completamente nuevos para la movilidad del mañana», explica el Dr. Claudio Longo, Jefe de Investigación e Ingeniería Avanzada de Continental.
La interacción entre humanos y vehículos es clave para una experiencia positiva. En el futuro, los autos interpretarán intenciones, movimientos y expresiones faciales incluso antes de abrirse las puertas. Para Jean-François Tarabbia, Jefe de Arquitectura y Soluciones de Red de Continental, el acceso intuitivo es fundamental: «El automóvil se convertirá en un dispositivo inteligente, como un móvil, utilizando tecnologías biométricas para mejorar la seguridad y comodidad del usuario».
Continental ya es uno de los líderes en soluciones de acceso basadas en dispositivos inteligentes para la producción en serie de los principales fabricantes de automóviles. Las innovaciones en el coche de demostración en el CES muestran lo que será posible en un futuro muy cercano.
El automóvil está evolucionando rápidamente hacia un vehículo definido por software. Cada vez más funciones están basadas en software. Para garantizar que el aumento de las funcionalidades, las nuevas tecnologías y los innovadores sistemas de asistencia no incomoden a las personas, una interacción armoniosa, homogénea y, sobre todo, intuitiva con el automóvil es esencial para una experiencia de usuario positiva: para el bienestar de los ocupantes, para su sensación de confort y, por último, pero no menos importante, para la seguridad.
El automóvil de demostración de Continental presenta innovaciones como la detección de aproximación (identifica personas cercanas), la identificación de usuarios mediante reconocimiento facial, el reconocimiento de intenciones (interpreta gestos, como mover la mano cerca de la puerta) y acceso intuitivo al maletero, que se abre automáticamente cuando una persona autorizada mira hacia el portón trasero por un tiempo determinado. En su primera generación, la apertura se activa aún con una ligera patada al parachoques.