El estudio Inside the Wallet de Paysafe muestra que el 62% de los ecuatorianos se sienten seguros cuando compran por Internet y observan que hay medidas de seguridad para proteger sus datos o si conocen el procesador de pagos, aunque el 53% identifica la seguridad como el factor más importante al seleccionar un método de pago.
El Black Friday, el evento de compras en línea se ha convertido en una prueba para la seguridad informática, especialmente a medida que la complejidad de los ciberataques y el uso de aplicaciones conectadas crecen. Esteban Sarubbi, Vicepresidente para América Latina en Paysafe, comenta que «los consumidores buscan no solo comodidad (52%), sino también protección en sus transacciones en línea, y esto es un reflejo de las preferencias hacia métodos de pago como billeteras digitales y el eCash como PagoEfectivo, que permite que los usuarios generen un código de pago al hacer una compra en línea, y la misma pueda pagarse mediante billeteras digitales con un QR, por transferencias bancarias o con efectivo en puntos de recaudo autorizados a nivel nacional”.
Si bien esto tiene un impacto positivo en lo económico y social, también pone de relieve la importancia de invertir en una estrategia de ciberseguridad integral que combine procesos, tecnología y expertos, en especial durante temporadas de compras como el Black Friday.
Además, en la temporada de fiestas, el tráfico en los sitios de comercio electrónico aumenta considerablemente, lo que trae consigo el desafío de mantener la seguridad en cada transacción. Es fundamental que las empresas de eCommerce se asocien con proveedores de pagos eficientes que utilicen los más altos estándares de seguridad y procesamiento de pagos. Con estas alianzas, los comercios en línea pueden ofrecer a sus clientes una experiencia de compra segura y confiable, protegiendo tanto los datos personales como financieros y reduciendo el riesgo de fraudes en esta época del año.
En Ecuador, el 44%2 de los consumidores valora contar con múltiples opciones de pago, pero estas deben estar respaldadas por medidas de seguridad robustas para evitar riesgos.
La protección de la información en internet requiere un esfuerzo colaborativo, y al adoptar prácticas seguras, tanto las empresas como los usuarios podrán disfrutar de una experiencia de compra en línea segura y sin contratiempos.