La Universidad Técnica Particular (UTPL), en conjunto con la Universidad San Francisco de Quito (USFQ), trabajan en proyectos en Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+I) para fortalecer la cooperación interinstitucional y la investigación aplicada en Ecuador.
Vicente Torres Briceño, gerente de proyecto del Vicerrectorado de Investigación de la UTPL, comenta que para la universidad es importante trabajar estos proyectos con otras universidades a nivel nacional y así generar conocimiento e impactar en la sociedad.
“Queremos transferir la ciencia aplicada hacia los territorios; por ello, esta es la tercera convocatoria conjunta que realiza la UTPL. La primera la hicimos con la PUCE y la UPS, y gracias a ello actualmente estamos ejecutando ocho proyectos. En la segunda nos aliamos con la PUCE sede Ibarra y la PUCE sede Santo Domingo, y desde noviembre estamos ejecutando once proyectos. En ambas convocatorias el objetivo ha sido impactar tanto en la frontera sur como en la norte. La última convocatoria con la USFQ es el resultado de líneas comunes basados en los programas institucionales de la UTPL, como recursos naturales y cambio climático, empresa y negocios, y desarrollo productivo”, expresó Torres.
El catedrático añadió se han elaborado cuatro propuestas en las áreas de recursos naturales, desarrollo productivo y empresa y negocios, con un monto total de $ 30 mil dólares y una duración de un año, iniciando en enero de 2025.
Amada Pérez Traba, coordinadora de Fondos Externos del Decanato de Investigación y Creatividad USFQ, señala que la buena relación entre la USFQ y la UTPL ha impulsado la búsqueda de sinergias para este tipo de colaboraciones.
“Esta es nuestra primera experiencia y para nosotros, como USFQ, es de suma relevancia, ya que nos permite obtener diversas visiones para abordar los problemas y ofrecer a nuestros investigadores la oportunidad de desarrollar y generar soluciones reales que impacten en las comunidades del país”, comenta Pérez.
La academia ecuatoriana tiene un papel protagónico en la construcción de una sociedad basada en el conocimiento. Al fomentar la investigación aplicada, las universidades y centros de investigación no solo generan nuevo conocimiento, sino que también forman profesionales altamente capacitados, capaces de liderar procesos de innovación y desarrollo tecnológico.