Eclipsoft integra la firma electrónica de un solo uso en los procesos digitales de las empresas.

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Hace 22 años, Eclipsoft lanzó su primera solución al mercado: un servicio innovador que permitía realizar transacciones y consultas bancarias desde un celular a través de SMS. En ese momento, fueron pioneros en desarrollar este tipo de tecnología para dispositivos móviles, justo cuando la telefonía celular comenzaba a masificarse. A lo largo de los años, han evolucionado en la provisión de servicios tecnológicos y de telecomunicaciones, con una amplia gama de soluciones de plataformas de banca móvil, notificaciones transaccionales y plataformas de fidelización para clientes. Conociendo del mercado y de las necesidades de sus clientes, ampliaron su portafolio con una nueva oferta dentro de la vertical de servicios de confianza, y como prestador de servicios de certificados digitales de un solo uso como la firma electrónica de un solo uso.

Las firmas electrónicas de larga duración y las de un solo uso son técnicamente idénticas. La única diferencia radica en el período de vigencia durante el cual el usuario puede utilizarlas, así como en su costo. Ambas comparten las mismas características de seguridad y el mismo proceso de generación, lo que asegura la veracidad de la identidad del firmante, en cualquier caso.

José Caballero, Gerente General de Eclipsoft, señala que los documentos y firmas electrónicas están ganando terreno en las organizaciones dentro de la gestión documental digital, no solo por razones ecológicas, sino también por el fortalecimiento en la seguridad de la información y la protección de datos digitales. “Físicamente, es imposible llevar un registro de quién accede a un documento, mientras que en el entorno digital se pueden implementar controles de acceso y auditorías en la gestión documental”, explica.

Con una larga trayectoria en el desarrollo de soluciones corporativas, Eclipsoft está acercando estas tecnologías a empresas que ven en las firmas de un solo uso una oportunidad y consideran que asumir el costo de estas soluciones les aporta fluidez en la gestión de sus trámites en línea.

Para el ejecutivo, la democratización de las firmas electrónicas de corta duración beneficia a todos. Los usuarios pueden gestionar sus requerimientos desde cualquier lugar del mundo y en cualquier momento, sin necesidad de imprimir documentos o desplazarse a oficinas físicas. Las empresas tienen la tranquilidad de que los documentos firmados electrónicamente cuentan con plena validez jurídica, a la vez que reducen los costos operativos y el almacenamiento físico de documentos. Todo esto se lleva a cabo bajo políticas de seguridad de la información aplicables.

Dado el crecimiento de los procesos digitales, hoy en día, la firma electrónica de un solo uso es aplicable en cualquier industria o proceso, tanto con clientes externos como internos. Uno de los casos de uso más demandados actualmente es el onboarding y la validación biométrica de identidad para la entrega de créditos en los sectores financiero y retail. Bancos y cooperativas están colocando créditos a través de canales digitales con solo unos pocos clics. Y ha sido posible gracias a las firmas electrónicas, que permiten firmar contratos, tablas de amortización, pagarés y demás documentación que respalda la entrega de dichos créditos.

Reconociendo la importancia de ofrecer una solución robusta y confiable, Caballero menciona que Eclipsoft llevó a cabo un exhaustivo levantamiento de las mejores prácticas internacionales en materia de certificados de firma electrónica basados en el estándar eIDAS de la Unión Europea, y de conformidad con las normas técnicas ETSI EN 319 401, ETSI EN 319 411-1, ETSI EN 319 411-2, ETSI EN 319 421 para la prestación de servicios de confianza. Adicionalmente, Eclipsoft cuenta con un sistema de gestión de seguridad de la información (SGSI), y la certificación de la norma ISO 27001.

Indica que la firma electrónica acreditada ofrece el nivel de seguridad más alto, y por consecuencia las máximas garantías legales. Su uso permite evitar situaciones de vulnerabilidad que dañan la reputación de las organizaciones y generan alarma en el mercado. La firma electrónica acreditada, también llamada firma reconocida, representa por ley el escalón más alto de seguridad jurídica y con esto con carga probatoria frente litigios sin necesidad de aportar mayores evidencias.

Finalmente, dijo: “El compromiso con los clientes y usuarios es mantener una solución segura, escalable y modular. Estamos conscientes que con los avances tecnológicos y con el desarrollo de la inteligencia artificial se pueden generar nuevas necesidades en el ámbito de la biometría y en la digitalización de los procesos. Nuestra idea es llevar esta solución a todas las industrias, dándole la validez jurídica que las empresas requieren para crecer de manera segura”.