Por Cristóbal Morocho Moreno, Consultor de IT-PMP-DASM.
La Inteligencia Artificial, IA, está revolucionando el panorama del sector de retail, abriendo un mundo de posibilidades para optimizar operaciones, mejorar la experiencia del cliente y aumentar la rentabilidad. Y el interés de los ejecutivos y CEO de las empresas de retail es genuino.
En el último Foro Económico Mundial se generó un documento denominado “Jobs of Tomorrow: Large Language Models and Jobs”, se presentó un análisis del impacto potencial de los grandes modelos de lenguaje (LLMs), su integración en varias industrias como un cambio de paradigma y menciona que la industria de retail tendrá una alta exposición a los procesos de Automatización, es decir de las tareas repetitivas aumentando rapidez y productividad; una mejora en los procesos de productividad y ayuda en resolución de problemas complejos, (augmentation). Por su parte en un documento de la consultora Accenture, anota que el 98 por ciento de los ejecutivos cree que la IA generativa será esencial para su estrategia en el futuro. En general, es evidente que la gran mayoría de las empresas todavía luchan por descubrir cómo y dónde aplicar la IA.
Más bien, los obstáculos están relacionados con la comprensión de cuáles de esos casos de uso identificados y seleccionados, probablemente les ayudarán a alcanzar sus objetivos empresariales y dónde se debe priorizar la inversión.
Es justamente ésta última situación, la que se ha convertido en uno de las principales limitantes para dar el paso hacia el uso y la integración de la IA en los procesos de la empresa.
Para lograr una implementación de inteligencia artificial en una organización, es importante consolidar un marco estratégico bien definido que no solo respalde las operaciones actuales, sino que también prepare el terreno para futuras innovaciones. En mi experiencia liderando proyectos tecnológicos y como profesional certificado PMP y DASM, considero que la adopción de la IA requiere de una estrategia como a continuación refiero.
Antes de embarcarse en cualquier iniciativa de IA, se necesita establecer objetivos específicos y alineados con la visión global de la empresa. La IA debe integrarse como una herramienta diseñada para abordar necesidades concretas y generar valor comercial. Por ejemplo, puede utilizarse para mejorar la satisfacción del cliente, optimizar la cadena de suministro, entre otros objetivos.
Una evaluación exhaustiva de las capacidades tecnológicas y de información de la empresa permitirá definir la calidad y la disponibilidad de datos, este proceso es crítico para cualquier proyecto de IA. Junto a ello, analizar si se cuenta o se requiere desarrollar una infraestructura adecuada y considerar asociaciones con expertos externos si las capacidades internas no son suficientes.
Iniciar con proyectos piloto que aborden problemas específicos permitirá a la organización medir resultados efectivos y gestionar nuevos recursos para las siguientes iniciativas de manera eficiente. Estos proyectos no solo deben resolver problemas sino también servir como prueba de concepto para demostrar el valor de la IA y fomentar el apoyo para futuras escalas.
Un elemento sobresaliente y de suma importancia es involucrar y contar con el compromiso de la Alta Dirección que tengan una comprensión de las capacidades de cada propuesta o proyecto con IA que permita agilizar cada fase o proceso y se destine los recursos necesarios para su implementación.
La implementación de la IA debe cumplir con las regulaciones de privacidad de datos y garantizar la seguridad de la información del cliente y otros usuarios que se vean afectados por la implementación de un proyecto definido y con funcionalidades de IA. Además, las empresas deberán regirse por principios éticos y transparentes sobre cómo se recopilan, utilizan y protegen los datos de los clientes, y garantizar que las decisiones impulsadas por la IA no sean discriminatorias. Un análisis de riesgo y su plan de mitigación para el proyecto será pertinente.
La IA requiere talento humano con las habilidades adecuadas para implementarla, administrarla y aprovecharla al máximo. La capacitación y el desarrollo continuo de habilidades en todos los niveles de la organización son vitales para cualquier iniciativa de IA, de manera que los ejecutivos o líderes de la organización deberán invertir en la capacitación y el desarrollo de los empleados para comprender y trabajar efectivamente con esta tecnología.
Las condiciones mencionadas anteriormente establecen un marco para una evaluación preliminar que toda empresa debería considerar antes de embarcarse en iniciativas de inteligencia artificial. Este análisis previo entregará a los líderes empresariales y tecnológicos una comprensión clara de los recursos existentes y las necesidades de desarrollo que deben abordarse para facilitar una adopción. Al evaluar la estrategia actual, las capacidades internas, la relevancia de los casos de uso, el compromiso de la dirección, la infraestructura de seguridad y privacidad, los principios éticos y la preparación del talento humano, las organizaciones pueden formarse una imagen de su estado de preparación para integrar soluciones de IA. Una evaluación establece una hoja de ruta para el desarrollo y la implementación estratégica de tecnologías alineadas con los objetivos a largo plazo de la empresa.
Para revisar con mayor detenimiento el impacto de la IA les invito a revisar mi libro “Integrando la Inteligencia Artificial en la Gestión de Proyectos: Un nuevo horizonte para los directores de proyectos”, publicada en la plataforma Amazon.