Christian Escobar Hormázabal dirige, planifica y ejecuta estrategias de IT regionales desde hace más de 15 años, liderando equipos multidisciplinarios en gestión de proyectos complejos; y en Ecuador, aproximadamente, dos años como CIO de FEMSA Salud – GPF y sus marcas Fybeca y SanaSana.
Desde su gestión y experiencia reconoce que los profesionales de alto impacto poseen una actitud positiva, pasión por innovar y la capacidad para comprender el negocio y sus procesos, anticipándose a los desafíos actuales y futuros para implementar soluciones que agreguen valor a la organización. Para él, «ser un profesional IT de impacto implica comprender que la tecnología es un vehículo para que la organización alcance sus desafíos».
Las estrategias que le han permitido liderar e implementar cambios en FEMSA Salud – GPF desde el área de IT incluyen escuchar y estar cerca de los usuarios para entender en detalle las necesidades del negocio y alcanzar los objetivos. Además, busca aliados dentro de la organización que desempeñen diferentes roles y posiciones para compartir ideas de mejora en sus propuestas o proyectos. Considera prioritario cumplir con los compromisos a través de un seguimiento continuo de los planes. Sin embargo, cuando no es posible cumplir con una fecha o se comete un error, enfatiza la importancia de notificarlo, buscar una solución y comunicar cómo se resolverá, con el objetivo de mantener las interacciones y la confianza del negocio.
Para Christian Escobar Hormázabal, los líderes de IT deben poseer habilidades específicas para afrontar los desafíos diarios que implica la evolución tecnológica y el mundo empresarial; el aprendizaje continuo es vital. Su enfoque va más allá del aula universitaria, por lo que vincula el conocimiento con la experiencia adquirida en las distintas operaciones de la compañía. Él propone algo que aplica a diario: las salidas al terreno, donde se experimenta y comprende los problemas a los que se enfrentan los colaboradores. El área de IT brinda soluciones con pequeños ajustes de alto impacto.
«La actualización y formación en aspectos técnicos y de negocios me han permitido aportar, desde la tecnología, al crecimiento y éxito del negocio, especialmente en estos tiempos en los que el acceso a la tecnología es más masivo y más alta la expectativa en nuestra área”
Además, destaca que desde el departamento de IT se desarrollan modelos que dan significado a los datos para convertirlos en información útil en el proceso de toma de decisiones. Uno de los desafíos más complejos que ha enfrentado en su gestión es dejar el lenguaje técnico al presentar propuestas y proyectos. «En ocasiones, caemos en tecnicismos que no siempre se comprenden y debemos esforzarnos por explicar claramente cómo la tecnología puede ayudar a resolver problemas o desafíos cuando es viable».
En la actualidad, los ejecutivos de alta gerencia ven en el equipo de IT un aliado ágil y con la capacidad de implementar soluciones no solo innovadoras, sino también alineadas con los objetivos corporativos. “El aporte del departamento de IT es un diferenciador que el negocio puede aprovechar para alcanzar sus metas”, afirma.
Para Christian, convertirse en un líder de IT de impacto implica adoptar una mentalidad de aprendizaje constante, estar al tanto de los nuevos modelos, tecnologías y formas en que evolucionan los negocios y la sociedad. Además, destaca la importancia de mantener una escucha atenta hacia los equipos, compañeros, superiores y clientes.