Miguel Sotomayor, lidera desde hace 10 años la Gerencia de Tecnología de Promesa, una empresa ecuatoriana comercializadora de productos de metalurgia, ferretería y automotriz.
Su pasión por gestionar la tecnología, nació con su afición por entender y saber cómo funcionaba una computadora y otros dispositivos electrónicos. Gracias a una beca deportiva, estudió en una de las dos universidades de Cochabamba, que en aquella época dictaban la carrera de ingeniería de sistemas. Su primer salto a la vida profesional surgió de una convocatoria a estudiantes universitarios para desarrollar un proyecto en la Embajada de Estados Unidos.
Buscar soluciones a los problemas fue la premisa que Miguel aprendió desde la universidad, con el paso del tiempo, práctica y la buena predisposición de sus jefes alcanzó no solo conocimientos sino experiencia que enriqueció la manera en que gestionaría la tecnología. Aún recuerda aquella frase “todo se puede” de su primer jefe, cuando junto a él, tuvieron que desarrollar un sistema de control de comercialización de coca en dos días debido a que el programa adquirido a un proveedor externo no funcionó. “El lunes a primera hora teníamos listo el sistema completamente funcional”.
Con mucha gratitud señala que quienes han marcado en gran medida su vida profesional han sido sus jefes. “Gracias a Dios, he tenido buenos jefes, además, un gran mentor, mi padre”, “Él siempre fue mi modelo a seguir y un ejemplo de esfuerzo en toda su vida profesional”. Además, señala que siempre ha estado rodeado de colegas expertos que han alimentado sus ideas de innovación.
Poder administrar la tecnología para mejorar la manera de hacer negocios e ir innovando ha sido una constante para Miguel Sotomayor quien gestionó tecnología primero en Unilever Bolivia y más tarde en Unilever Andina Ecuador. La propuesta de trasladarse a otro país, le llegó al nacer su primer hijo, y decidirse le tomó tiempo. No era lo mismo cambiar de ciudad como lo hizo en sus inicios laborales, de Cochabamba a La Paz, que ir a otro país.
Luego de visitar y conocer Ecuador, sus dudas y temores desaparecieron. “El cambio fue natural debido a la similitud entre ambos países, además, ayudó mucho al proceso de adaptación, compartir con otros ejecutivos bolivianos que laboraban también en la multinacional”.
Con esta decisión, Ecuador se convertiría en su país de residencia por más de 14 años, 10 de ellos, liderando la Gerencia de IT de la empresa Promesa. Aún lleva consigo todo el aprendizaje recorrido en la multinacional, el ambiente laboral de empatía y sinergia entre colaboradores y su ímpetu por innovar. “Todo lo que se arraiga en el corazón, no se pierde”, dice.
Eso es lo que ha construido y transmitido en Promesa donde inició una nueva etapa de desafíos con la suficiente solvencia para implementar proyectos innovadores de todo tipo. Para Miguel Sotomayor, la confianza abre el camino para plasmar todas las ideas en soluciones que ahora operan el negocio, dice al recordar el apoyo incondicional del gerente general, Alberto Bustamante. “Esa misma confianza la deposito en mi equipo y logramos sugerir e implementar siempre las mejores alternativas de innovación”.
Uno de los hitos que Miguel Sotomayor señala como un logro no solo de su equipo de trabajo conformado por cinco profesionales, sino de la compañía. La adopción del trabajo remoto es una realidad desde hace dos años, y bajo esta modalidad el ejecutivo, desde 2019, administra la operación y proyectos de tecnología de Promesa en Ecuador desde Bolivia con el mismo nivel de aporte estratégico que su gestión “in situ” de otros años.
Ama viajar por largos recorridos en vehículo descubriendo paisajes, conociendo costumbres y la gastronomía de los lugares que visita. Realizó un recorrido de Ecuador a Brasil y viceversa en una experiencia familiar de 13 mil kilómetros. Además, compartir las fechas especiales con sus padres, hermana e hijos en Bolivia.