La especialista considera que esta cuarta revolución permite habilitar la comunicación entre personas, máquinas y procesos. “Aunque implica inversión, primero se requiere difusión y capacitación a los ejecutivos, profesionales que intervienen en la producción y a los profesionales de tecnología de la información y las comunicaciones”.
Velásquez también es partidaria de establecer un plan de implementación que genere valor al negocio a corto, mediano y largo plazo. Al mismo tiempo, asegura, es necesario trazar la hoja de ruta de acuerdo con las características particulares de cada industria y buscar fuentes de financiación.
Entre tanto, Esteban Castro, gerente de operaciones de la compañía Imptek Chova del Ecuador, considera que en el país son muchas las empresas que están discutiendo el tema, pero la migración hacia la tecnología que haga realidad la industria 4.0 todavía es lenta.
Castro indica que uno de los obstáculos para su adopción masiva son los altos costos de inversión. “Nosotros en Imptek Chova del Ecuador estamos tratando de vincular proyectos con desarrollos propios, y personalizados, porque hay muchas plataformas que son libres y que se las puede implementar”.
El ejecutivo advirtió también que la industria de alimentos y cosméticos ecuatorianas están a la vanguardia de la industria 4,0. “Obviamente por la incidencia que tienen en la manufactura de sus productos y los niveles de caducidad que tienen estos artículos están obligados a tener estándares mucho más altos de calidad”.
Al referirse al sector de la construcción señaló que ya se están dando los primeros pasos, porque ya existe tecnificación de algunos procesos. Por otro lado, asegura que hacen falta políticas gubernamentales alineadas a estos procesos y una cohesión entre la academia, el Estado y el sector industrial para definir un modelo de industria para los próximos 10 y 20 años
Él es partidario de desarrollar un norte integrador para avanzar en un mismo camino. “Quien debería liderar esto es posiblemente el Estado con una política general en términos de la industria, caso contrario cada uno está velando por su propio desarrollo”.
Se estima que la estructura productiva de la industria en Ecuador está focalizada en las ramas tradicionales como son la producción de alimentos y bebidas que son las generadoras de las mayores ventas en toda la industria manufacturera. De acuerdo con el análisis de la Superintendencia de Compañías, el sector manufacturero durante el período 2013-2015 se generó USD 3.591, 11 millones en utilidades de todos los sectores económicos del país. Hoy por hoy, las industrias deben cumplir un objetivo de negocio sustentado en la producción a través de la fabricación y comercialización de productos. Es en esa medida que se adopta la tecnología, principalmente, para automatizar la planificación de los procesos productivos. Para Javier Armas, gerente de Tecnologías de la Información y Comunicación de Oriental Industria Alimenticia, es una condición imprescindible la adopción y a actualización tecnológica debido a que “la competencia no espera”.