De esta forma la mayor red social del mundo permitirá que cualquier página web asociada a Facebook acceda a la información personal de sus usuarios, produciéndose un nuevo cambio en la política de privacidad de la red social.
Con esta decisión ya no será necesario que el usuario dé su aprobación para que Facebook se conecte con la página web y se comparta la información.
La información susceptible de ser compartida con terceros será aquella que los usuarios tengan en su perfil con la opción “compartir con todos”, incluyendo fotos de perfil, páginas, ID del usuarios o grupos, según recoge Europa Press.
Según el blog oficial de la empresa, con este cambio si un usuario entra en su perfil de la red social y luego visita una página web, todo el contenido de su cuenta quedaría a disposición de la página.
Las asociaciones de EEUU que velan por la protección de datos ya han expresado su rechazo ante este nuevo giro en la política de privacidad de Facebook, según informa Financial Times.