«Es un gran aparato revolucionario, pero es un nuevo mercado. Un montón de consumidores potenciales están todavía preguntándose para que sirve», apunta a Bloomberg una analista de Morgan Stanley.
El iPad conseguirá, aún así, el ya famoso efecto Apple. Con el lanzamiento de las diferentes versiones del iPhone y su llegada a los diferentes mercados, Cupertino siempre ha conseguido que hordas de incondicionales hagan cola, sean cuales sean las condiciones climáticas y el tiempo de espera, para acceder al producto. El iPhone es el ejemplo más claro, pero son varios los productos que han conseguido el efecto Apple.
El iPad no será menos y ya se esperan colas en las entradas de las diferentes tiendas de Estados Unidos en las que se distribuirá el tablet, según Reuters. Aún así, acceder al equipo será complicado. Sólo se venderá en la tienda online de Apple y los espacios oficiales de la firma, así como en la cadena de distribución Best Buy, pero sólo en aquellas que cuenten con un Apple Corner.
Best Buy tampoco podrá disponer alegremente de la tableta: sólo recibirán quince ejemplares y cuatro serán obligados para exposición. La distribuidora no podrá venderlos bajo ningún precio. Estarán ahí para ser vistos y tocados y, quien sabe, alentar aún más la fiebre del producto.