Los conocidos como Predator Drone son unos aviones de reconocimiento que vuelan sin piloto y envían vídeo en streaming de lo que está viendo en ese momento. Resulta que en Irak gracias a una aplicación de menos de 26dólares son capaces de recibir dicha señal y ver el vídeo en cuestión.
La aplicación de Windows desarrollada en rusia hace posible que los insurgentes iraquíes intercepten el vídeo en directo de los Predator drones. El problema de seguridad se conoce desde hace una década pero desde el Pentágono pensaron que los insurgentes no serían suficientemente inteligentes como para imaginar como explotar el problema.
Los insurgentes reciben el vídeo utilizando una aplicación, SkyGrabber, que tiene un coste de 25,95 dólares, con ello pueden determinar qué zonas están siendo vigiladas y cuales no. Según parece el problema llega a la hora de transmitir el vídeo que en el último paso se realiza de manera bruta, sin cifrar.
El mismo problema parece que ha sido explotado en Afganistan.