“Climategate” no es un escándalo, es un burdo montaje de los negacionistas

Share
Científicos de la Universidad canadiense de Victoria, han alertado del intento de robo de datos en sus ordenadores dedicados a investigación sobre el clima antes incluso del acceso no autorizado al CRU británico. Los accesos ilegales coinciden sospechosamente con la conferencia del clima de Copenhague y algunos medios indican que el escándalo no es el supuesto Climagate, sino que detrás del robo de datos para intentar negar lo innegable, se encuentren poderosos intereses ejecutados por los servicios secretos rusos.

Andrew Weaver, científico de la Universidad de Victoria, denunció que había habido varios intentos de robo de datos en su Universidad los últimos meses. El científico aseguró que el hecho guarda relación con el intento de los negacionistas para desacreditar el trabajo científico sobre el Calentamiento Global y el Antropogénico, que estima los efectos producidos por las actividades humanas en el clima de la Tierra.

Frente al escándalo montado ante el aparente aumento de niveles en algunos de los datos que manejan los científicos (explicado por los obligados filtros imprescindibles para aportar conclusiones científicas), están las evidencias que indican que los servicios secretos rusos estarían detrás del robo de datos para sustentar el Climagate.

Objetivo: Los poderosos consorcios rusos del petróleo y gas estarían preocupados del descenso de venta de producto si se rebajan las emisiones en Copenhague. Pregúntate amigo lector a quién beneficia el escándalo montado ante el robo de datos. ¿A unos científicos que estudian el clima y persiguen un crecimiento sostenible o a poderosos grupos de presión que intentan mantener el negocio del gas y el petróleo a costa de la salud del planeta y sus habitantes?

Esperemos que por encima del gran negocio, de Copenhague salga un acuerdo vinculante y responsable. No será fácil ante la gran cantidad de intereses.